Traiciones, enojos y pegoteos

El sábado 24 de junio se concretó por parte de las agrupaciones políticas la entrega de sus álbumes con las figuritas elegidas para competir el 13 de agosto en la PASO nacional. Ya con roles e identidades de postulantes conocidos, en su mayor parte vigentes desde los últimos períodos presidenciales, vale mencionar aspectos que pueden considerarse didácticos para lo que resta del  proceso electoral.  

1.- Para no atarse a debates estériles disfrazados de ideológicos que impidan exigir programas de gobierno integrales, concretos y factibles, se debiera asumir que Lenin, Trosky, Mussolini, Yrigoyen y Perón, entre otros, son inocentes en cuanto a lo actuado desde hace décadas por nuestros políticos. De los tres primeros mantiene vigencia las estrategias de acción directa para generar caos social, tema a desarrollar a futuro porque ya se está reinstalando en nuestro país.

2.- Lo transitado repitió la impúdica y recurrente manipulación de las reglas electorales, ya sea en el incumplimiento de normas, de requisitos para ser candidatos, ordenamiento de las posiciones en listas según porcentajes de votos en las internas, fijación de calendarios, argucias como listas espejo, dobles candidaturas, y la escandalosa ley de lemas, utilizada aunque existan las PASO. De igual modo se mantiene la resistencia a implementar las listas únicas que impidan manipulación de urnas, votantes, y negociados de impresión de boletas de los llamados “sellos de goma”. Se citan solo dos casos. En Tucumán rigió el sistema de acoples, teniendo el oficialismo 61, y la principal oposición 16. En Formosa, con ley de lemas, 64 de las 88 boletas ubicadas en el cuarto oscuro incluyeron a Insfrán, y 17 al candidato opositor del Frente Amplio. Estos son uno de los tantos retrocesos que se fueron acumulando desde las elecciones de 1983.

3.- En Tucumán, Beatriz Ávila perdió como candidata a la intendencia de San Miguel de la que su esposo Alfaro es intendente. Su derrota se explica por cortes de boleta por los cuales obtuvo 11.000 votos menos que su esposo en la capital, candidato perdidoso a gobernador, por lo que cabe suponer que hubo quienes no olvidaron que en 2019 dejó el bloque legislativo de Juntos por Cambio para alinearse con el kirchnerismo tras la derrota de Macri. Dato útil para quienes políticamente plantean un consenso del 70% para gobernar, sin aclarar si se conformará con personas formadas y con principios, o con oportunistas políticos que negocian cargos y privilegios.

4.- Tras el habitual juego “yo quiero ser presidente” como recurso para horas antes de la presentación de los álbumes negociar puestos privilegiados en las listas, quedaron confirmados 14 candidatos, dispuestos a conducir a un país que de “tierra arrasada” pasó a estar “en llamas”, interés que haría sospechar que pase lo que pase los privilegios políticos saldrían indemnes. Las denominaciones de las coaliciones, a falta de identidades partidarias unívocas como radicalismo, justicialismo y socialismo, fueron diseñadas bajo criterios casi comerciales. Por ello debe alertarse que la llamada Unión por la Patria contiene los mismos ingredientes que el Frente de Todos, producto que fuera retirado del mercado. La izquierda clásica es la única que mantiene una tradición: cuatro candidatos conocidos compiten en tres listas distintas.

5.- Una situación inédita en los procesos electorales se produjo con el cierre de listas del oficialismo. El día 22 se dio por definida la fórmula Wado de Pedro-Manzur, y el 23 a última hora se oficializó la fórmula Massa- Rossi. Pese a lo cual se logró que casi todos los principales actores “desunidos” incluidos los de la “generación diezmada”, se ubicaran en posiciones de privilegio para continuar protegiendo los intereses de los argentinos. Las curiosidades las brindaron Scioli abandonado en su lancha, y Wado que pasó a ser “Wadito” en cuestión de horas. Estos avatares los explica claramente Maquiavelo en el capítulo XII de “El príncipe”, donde describe a los soldados mercenarios.

6.- Tras el intenso proceso, el pasado lunes en un acto que una vez más utilizó a los manoseados derechos humanos como excusa, Cristina Kirchner intentó explicar el juego de presiones previo al cierre de listas, sin privarse de, sonriendo, llamar “medio fullero” (tramposo), al candidato Massa sentado a su lado. Hacia el futuro inmediato vale resaltar tres consideraciones: 1) Si bien la vicepresidenta perdió la capacidad de definir una candidatura presidencial por un tuit, aun con sus naves escoradas, las decisiones finales las adoptaron quienes desde diciembre del 2019 marcaron el rumbo del presente gobierno: Cristina Kirchner, Alberto Fernández y Sergio Massa; 2) Quedó expuesta la incapacidad del kirchnerismo/peronismo para formar nuevos dirigentes aptos, expresada en el amateurismo con que el delfín Máximo se manejó como presidente del PJ, del bloque de diputados y del armado electoral. 3) Una ironía que refleja la insustancialidad de los llamados “relatos”, es que los “revolucionarios populares” deberán votar al candidato de derecha Massa.

Buenos Aires, 28 de junio 2023

Figuritas políticas

La actual campaña electoral puede analizarse como un conjunto de actores políticos (rol activo), que desde el escenario mediático intentan convencer de las virtudes de sus acciones e intenciones a los espectadores (rol pasivo), para lograr un éxito de taquilla electoral. Al espectador (ciudadano común), solo le cabe juzgar, opinar, protestar, pero rara vez incidir en la trama de la obra. El problema de nuestras compañías electorales es que sus publicidades de campaña tales como “el cambio, la esperanza, ponernos de pie”, no guardan consonancia con los antecedentes de los actores, y sus reiteradas y fracasadas puestas en escena. Debieran entonces ser los ciudadanos quienes impulsen (o fuercen) verdaderos cambios, para lo cual cabe ejercitar pautas analíticas básicas y comprensibles por todos los sectores sociales. Un modo de hacerlo es replicando el clásico entretenimiento infantil del armado de un álbum de figuritas, en este caso presuponiendo quiénes encabezarán los primeros puestos de la lista de preferencia de cada jugador, cuyo cierre se producirá el 24 de junio. La propuesta no es superficial, pues es a lo que están dedicados los diversos espacios políticos.

El juego es formativo por dos razones: 1) en la puja por poder y privilegios, los actores políticos afrontan un fuerte estrés que los impulsa a transparentar actitudes y expresiones que habitualmente ocultan; 2) los principales referentes políticos demuestran que para armar listas que les permita permanecer, no hay grietas insalvables; criterio que deben adoptar los ciudadanos para encarar el juego con independencia del lado de la “grieta” en la que se ubiquen. Dado que un factor muy importante del juego es el humano, cabe tener presentes tres frases claves, pronunciadas en épocas y circunstancias distintas. En el siglo XVI, Maquiavelo en su tratado El Príncipe señaló que “El príncipe que descanse en soldados mercenarios no estará nunca seguro y tranquilo, porque son ambiciosos, desleales, valientes entre los amigos, pero cobardes cuando se enfrentan a los enemigos”. En el siglo XX, el actor, humorista y escritor estadounidense Groucho Marx expresó con ironía: “Estos son mis principios, si no le gustan tengo otros”. Ya en el siglo XXI, cobra vigencia una expresión criolla representativa de nuestra actualidad: “En política de ser conveniente, los agravios se olvidan en pocos años”.

A la dificultad que emerge de las evaluaciones personales de los políticos, se agrega la ausencia de identidades partidarias coherentes en el tiempo, por lo que el juego no prevé acertar el nombre de fantasía de las coaliciones en cada elección, y que no se utilice como alternativa del juego el álbum de figuritas de jugadores de fútbol, asimilando el cierre de candidaturas el 24 de junio con el cierre del libro de pases en la AFA. Porque es impensable, por ejemplo, que Boca Juniors e Independiente se presenten como tales en un campeonato, y se inscriban como Boca Senior y Dependiente en otro, como sucede en nuestras coaliciones políticas: distintos envases con el mismo contenido. La última dificultad la presenta las liquideces o gasificaciones ideológicas, que motivaron el peculiar diseño de las fichas a las que deberá adjuntarse el nombre de cada candidato elegido para el conformar la lista armada por cada jugador. Las de escudería “peronista” se subdividen en las variantes peronista puro, menemista, kirchnerista, de origen UCDE; federal y republicano. La escudería “radical” está integrada por las fichas radical puro, radical K, radical polifuncional y bautizado como radical en edad adulta. Para incorporar a las abundantes alternativas restantes, el juego tendrá una ficha “comodín”, subdividida en las opciones de derecha, centro derecha, centro izquierda e izquierda.

Como se observará, el juego incluye coaliciones, candidatos y mosaicos ideológicos, pero carece de programas integrales de gobierno, lo que abre un interrogante fundamental: ¿serán explicitados por los candidatos a partir del lunes 26 de junio hasta las PASO del 13 de agosto (49 días), o se los expondrá y debatirá a partir del 14 de agosto hasta la elección nacional del 22 de octubre (69 días)? Dicho de otro modo, ¿los candidatos de un mismo espacio que compitan en las PASO, explicitarán sus divergencias y concordancias en temas básicos de un plan de gobierno para que el ciudadano elija, o seguirá el superficial debate acerca de quién es paloma y quién halcón?

Buenos Aires, 14 de junio 2023

Kirchnerismo didáctico

El kirchnerismo en cabeza del matrimonio Kirchner ejerció entre mayo del 2003 y diciembre 2015 una continuidad de gobierno de 150 meses, superando a Perón (111 meses); Alfonsín (102 meses) y Menem (125 meses). Retornó al gobierno en el 2019 con el inédito ensayo de Cristina Kirchner de compartirlo con Fernández y Massa, estrategia que se repetirá, pues la vicepresidenta será quien defina los roles electorales de su hijo Máximo, De Pedro, Kicillof y Massa, ratificando que quienes ejercen el poder en base a principios autocráticos, aún con graves crisis se resisten a abandonarlo. El futuro mediato plantea el interrogante de si el próximo gobierno en la gestión 2023-2027, en un marco de acumulación de malas gestiones y extremo hartazgo social, podrá realizar transformaciones virtuosas. Por lo que el principal obstáculo no será la “economía”, sino la “continuidad” de los principales responsables políticos, sindicales y empresarios de la prolongada crisis argentina.

Paradójicamente esta continuidad facilita que los ciudadanos, al conocer a los principales actores del proceso electoral, sus prácticas públicas y añejas técnicas propagandísticas y discursivas, tengan la capacidad de evaluar la calidad, veracidad y viabilidad de las propuestas de gobierno, eludiendo el simplismo de que ante un mal gobierno el próximo será mejor, viejo recurso para que nada cambie. Por el contrario, cuanto más ostensibles sean las malas praxis didácticamente expuestas por el actual gobierno, mayores deberían ser las exigencias para juzgar las propuestas opositoras. Si bien queda claro que hasta el cierre de listas de candidatos el 24 de junio se mantendrán las habituales pujas para mantener posiciones públicas privilegiadas, en este devenir hasta las elecciones presidenciales deben rescatarse hechos que por acción u omisión configuren una grilla de temas a ser tratados por los candidatos. Al momento se destacan dos condicionamientos: 1) la CGT manifestó que no aceptará reformas laborales; 2) funcionarios amenazan que si se afectan derechos adquiridos (léase privilegios), habrá sangre en las calles. Las actuales gestiones relacionadas con la falta de reservas en el Banco Central ofrecen aspectos de análisis, como la escasa profesionalidad de los gestores de gobierno, y entendibles reservas en el campo internacional ante el reclamo argentino de incrementar deuda, sea en dólares, yuanes, reales, o lo que fuera, desmitificando que el único responsable de nuestros problemas es el FMI, institución integrada por los más importantes países para socorrer a asociados con crisis de deuda. Huelga recordar que nuestro país es un reconocido moroso consuetudinario. Lo interesante para destacar, es que una problemática esencialmente compleja como la economía sea abundantemente utilizada en el marketing político, a través de datos de reservas del Banco Central, riesgo país, créditos, deudas, tasas de interés, intercambios comerciales, entre muchos otros, poco comprensibles para el ciudadano común y su calidad de vida, pero que debidamente amontonados y manipulados cumplen con el principio del eslogan: simple, breve, y que todos supongan entenderlo.  El artilugio consiste en evadir mencionar los dos factores que toda la sociedad entiende: inflación y poder adquisitivo del salario, y compararlos al menos con los de los países vecinos.

De la gira organizada para el operativo “mangueo criollo”, se destacan tres detalles para análisis próximos: 1) La representación estuvo encabezada por un abogado que oficia de ministro de economía; un canciller sin experiencia diplomática, y un diputado de apellido Kirchner cuya expresión más difundida en China fue “Destaco el carácter colaborativo de la relación donde las ayudas se realizan sin ningún tipo de presión”. Por su escasa experiencia política, quizás ignore que China es un aportante fundamental en el FMI; que acordar con este organismo es prioritario para cualquier desembolso, y que las grandes potencias combinan decisiones económicas con intereses geopolíticos. Pero en este caso el eslogan de un gobierno pretendidamente popular de izquierda naufragó: las condiciones de ampliación del monto de yuanes en cuanto a requisitos, cronogramas de desembolsos, amortizaciones y tasas de interés, son secretas.

La oposición por su parte no quiso perder cartelera, y a tres semanas de la elección provincial en Córdoba, se produjo una extemporánea propuesta asociativa entre Larreta, Morales y Schiaretti, bajo un eslogan igualmente ocultista: la de ampliar y/o ensanchar la coalición. Pero como en el caso China, las bases del “acuerdo patriótico” al menos hasta el momento son secretas. La lucha por el poder y privilegios provoca amnesias:  Cristina Kirchner para triunfar también “amplió su espacio” con Alberto Fernández, Sergio Massa, Leopoldo Moreau, Ricardo Alfonsín, y otros. Los resultados están a la vista.

Buenos Aires, 07 de junio 2023