Grageas políticas

El desconcierto y ansiedades surgidas con motivo del ingreso de una pandemia en nuestro país, rompe con la cotidianeidad de los hechos sociales y políticos del país, que deberán visualizarse de manera aislada a manera de grageas, mencionando los que por su significación o personajes actuantes, recobrarán vigencia una vez superada la inédita situación de emergencia. Cabe mencionar algunos de ellos:

1.- El temor ante sucesos a gran escala de difícil manejo, en especial los provocados por un enemigo invisible, genera de manera genuina y no declamatoria, que políticamente se reclame la unión de todos los sectores en pos de un objetivo común. Es de esperar que tan saludable actitud, aunque sea parcialmente, se mantenga una vez superada la pandemia.

2.- Las situaciones sociales críticas transparentan a sectores, sean públicos o privados, esenciales para una comunidad: médicos, enfermeras, pilotos, azafatas, fuerzas de seguridad, choferes, transportistas, prestadores de servicios básicos, empleados en fábricas y comercios, entre otros. Actúan en lo que en guerras se llaman puestos de combate en el frente. En estos campos laborales, los políticos no suelen acomodar a familiares y amigos.

3.- El punto anterior debiera servir para asumir la urgente necesidad de modificar la sobredimensionada, ineficaz y costosa estructura burocrática estatal, que solo incrementa pobreza. La crisis señala un punto de partida: menos organismos, jefes, asesores, defensores de pobres, y más personal en puestos de combate.

4.- En medio de las crisis, las “familias políticas” no pudieron con su naturaleza. El 18 de marzo el presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa, con acuerdo te todos los bloques (lo que es impensable para aprobar leyes), decidió otorgar de manera “excepcional y por única vez” la suma de $ 100.000 por legislador, para asistir a grupos de riesgo o entidades de la sociedad civil relacionadas con personas afectadas por la pandemia. Eludiendo el sencillo trámite de donar el total del monto implicado al Ministerio de Salud. Ni aún ante emergencias, las clásicas dirigencias abandonan formas mercantiles de hacer política.

5.- La pandemia barrió de la superficie a un virus instalado en el país desde hace meses llamado “lawfare”, cuyo efecto nocivo es el de barrer con las causas judiciales de corrupción estatal-privada. Pese a que sus agentes de transmisión son conocidos (políticos, jueces, empresarios, sindicalistas), aún no pudo ser derrotado. Concluida la pandemia, se estima que resurgirá con fuerza.

6.- El canciller Felipe Solá, aún no asentado en su cargo debido a su formación de agrónomo, se le ocurrió twitear criticando a empresas aéreas extranjeras por vender pasajes, y al perder rentabilidad los vuelos, dejar clavados a argentinos en el exterior. Por el mismo medio le respondió escuetamente Iberia: “es por una decisión de su gobierno, que nos impide viajar al país”.

7.- El showman Marcelo Tinelli es un optimista empedernido. Ante crisis y cambios de gobierno, siempre ve una oportunidad. Presidente del club San Lorenzo e integrante de la Mesa del Hambre con otros famosos (que se reúnen solo en el microcentro), la AFA encabezada por “Chiqui” Tapia, Moyano, Ameal, entre otros luchadores sociales, en plena pandemia lo designó presidente de la nueva Superliga, que manejará millones de dólares de clubes de fútbol profesional llamados “entidades sin fines de lucro”. La primera decisión fue la de continuar el fútbol a puertas cerradas a fin de entretener a los ciudadanos en cuarentena. Ante la observación que faltaría calor popular en las tribunas, respondieron los dirigentes con tono barrial: popular es lo que paga la televisión, gil. Lo que produjo la rebelión de los modernos gladiadores llamados futbolistas, derrotando a los modernos emperadores conocidos como dirigentes. Decepcionado, el 19 de marzo Tinelli partió con su familia en vuelo privado a Esquel, por considerar a esta localidad más segura que Buenos Aires.

8.- El mismo jueves, el sutil ideólogo Grabois, no pudiendo soportar el aislamiento, organizó una manifestación pública de manteros.

Visto el derrotero seguido por algunos de los luchadores contra el hambre, a los pobres solo cabe aconsejarles que se cuiden como mejor puedan.

Buenos Aires, 25 de marzo de 2020