Habló Nosiglia

Recientemente el periodista Carlos Pagni entrevistó al histórico político y empresario radical Enrique “Coti” Nosiglia, reconocido intermediador y armador de circuitos políticos y empresarios entre bambalinas, rol que nunca abandonó. Sin detenerse en consideraciones personales sino valorizando su experiencia política de 40 años, cabe destacar lo expresado respecto al gobierno de Cambiemos: “Macri se sobrevaloró, como sobrevaloró la posibilidad de una lluvia de inversiones. Creyó que las cosas se iban a solucionar porque un gobierno no populista había ganado a uno populista, o porque la sociedad iba a entender que su propuesta era la correcta; le fue muy mal y terminamos mal. Macri no entendió la política, como lo hizo el radicalismo cuando le tocó estar al frente del Poder Ejecutivo Nacional”. Aceptando la etiqueta “Macri”, aunque corresponde decir “gobierno de Macri”, vale detenerse en tres expresiones relevantes con vista a las elecciones presidenciales del 2023: sobrevaloración, propuesta correcta y entender la política.

1.- Sobrevaloración.- Es verdad que en sus declaraciones preelectorales Macri se sobrevaloró, defecto que al menos lo salva del vicio de la mentira. Esperó una lluvia de inversiones privadas y afirmó que derrotar a la inflación era fácil. Para no repetir esta ingenuidad, una futura propuesta de gobierno deberá considerar la existencia de una estructura institucional, gremial y empresaria consolidada y prebendaria de los recursos del Estado, en el marco de una fuerte corrupción estatal-privada como agravante.

2.- Propuesta de gobierno.- Se presentan como tales a dialécticas grandilocuentes e inconsistentes centradas en promesas no acompañadas de los instrumentos y cronogramas explícitos para cumplirlas. Finalizadas las campañas, las promesas se desnudan como mentiras. Para no incurrir en nuevos engaños al electorado, es imprescindible generar un programa en el que inicialmente los sectores públicos, privados  y corporativos cedan privilegios, para luego ingresar en el terreno más duro de los sacrificios. Comenzando por la sobredimensionada estructura estatal, como señal de racionalidad y ejemplaridad. Hasta el momento, incluido el acuerdo con el FMI, no se observa tal decisión ni en el oficialismo ni en las oposiciones.

3.- Entender la política.- Suele confundirse el concepto abstracto de política, inmanente a cualquier sociedad y sistema de gobierno, con el concreto de políticos, quienes son los responsables de los éxitos y fracasos en el desarrollo equitativo y sostenido de un país. Al respecto, nuestro país presenta una sorprendente continuidad de las dirigencias responsables de una decadencia que lleva al menos dos generaciones, lo que hace sospechar que “entender la política” se traduce en sostener privilegios estatales y formas conservadoras de ejercer el poder.

Aplicados estos tres conceptos a nuestra realidad política, se observa que abunda la sobrevaloración personal asociada con la necedad; propuestas declamatorias no insertas en un programa de gobierno explícito, y entender a la política como superficiales debates teñidos de contenidos ideológicos, que enmascaran el objetivo de que nada cambie. Ello explica la ausencia de políticas innovadoras, y una ineficaz y sobredimensionada estructura estatal conformada para responder a una especie de  club de amigos, algunos de los cuales simulan ser enemigos, pero sin que nadie pierda cargos ni privilegios políticos.

Este repetido devenir de los políticos y no de la política, se deberá tener presente para entender la reconfiguración de las alianzas que competirán electoralmente en el 2023, en base a dos fenómenos habituales: uno similar a una metamorfosis, que sufrirán algunos integrantes de las dos principales coaliciones, para con cargo en mano mutar en sus declamadas fidelidades (potencial ejemplo en el kirchnerismo, Sergio Berni). El otro fenómeno podría adoptar la designación de moda “no binario”, por el cual integrantes de cierto peso político de una y otra coalición, intentan generar un tercer agrupamiento electoral que los favorezca personalmente. Casos a seguir: Sergio Massa y Gerardo Morales. En cuanto a los ciudadanos comunes, solo les resta continuar con el salvavidas bien ajustado, y practicar el ejercicio del escepticismo.

Buenos Aires, 16 de marzo 2023